SALA CERO, ROSARIO CARMONA Y TURBOPLASMA
Pequeños objetos de arte y una gran instalación
expone Sala Cero en septiembre
La muestra de Rosario Carmona y la instalación del conjunto Turboplasma estarán abiertas del 6 de septiembre al 15 de octubre.
Santiago, septiembre 2011.- El martes 6 de septiembre a las 19:30 horas se inaugura en la Sala Cero de la Galería Animal la muestra titulada Otras prácticas de la artista Rosario Carmona, un proyecto de exposición individual que se compone de tres series.
La primera de ellas titulada Las hormigas consiste en tres circunferencias de vidrio de un metro de diámetro que tienen pintadas hormigas avanzando circularmente. “La obra toma como referencia el comportamiento de las hormigas cuando pierden el rumbo y comienzan a caminar en círculos, ya sea solas o en grupos, hasta que mueren de cansancio”, explica la artista.
La segunda, Los comediantes, está compuesta por 200 piezas de dominó de 2x4.5 cm c/u que en su reverso llevan pintadas escenas cuyos personajes son diversos tipos de trabajadores de fábricas, construcciones, etc. En las piezas los trabajadores son desalojados de sus contextos representando sólo sus uniformados cuerpos mientras ejecutan sus respectivas acciones. Las piezas serán fijadas directamente al muro más largo de la sala con pegamento, alternando las 200 piezas pintadas con otras en blanco. Su organización en líneas horizontales toma como referencia la disposición de los ladrillos en un muro apelando a un sistema constructivo inacabado y/o deteriorado.
La tercera serie llamada Las hojas reúne hojas de árboles caladas con figuras geométricas y que según Rosario Carmona hacen referencia a los calados que les hacen las hormigas como si éstos, codificados, transmitieran un mensaje que no es posible descifrar a simple a vista.
“El proyecto nace de la pregunta cómo dar cuenta de la relación visibilidad/invisibilidad a la que la mayoría de los trabajadores están destinados. Lo que realizan es indispensable, sin embargo, no son lo relevante del paisaje. ¿Cómo obligar a la memoria a atestiguar a los comediantes? La miniatura surge entonces como el forzoso reparo del detalle”, profundiza en su obra la artista. “Toda la exposición surge de una necesidad de hacer evidente el trabajo en sí mismo como acción y proceso, resaltando la importancia de las acciones que nos parecen invisibles y qué sólo apreciamos en su resultado como, por ejemplo, los productos de uso masivo, los edificios e incluso las obras de arte. Me interesa pensar en el valor del trabajo y el sentido que éste evidencia”.
De esta manera, para Rosario Carmona la serie Las hormigas piensa en el sentido que articula la vida de un trabajador y hace un paralelo con la insistencia en el arte. “El gesto repetido es lo que se percibe de la persona, éstas sólo se nos hacen presentes por las acciones que realizan dejando caer en un sinsentido la individualidad que paradójicamente es lo que cualquier artista busca. Por otra parte, Los comediantes intenta reivindicar tal individualidad haciendo aparecer a aquellos ‘invisibles’, las pequeñas personas y sus pequeños gestos, retratándolos en sus quehaceres, restándole importancia tanto a sus herramientas como a lo que construyen. Por último, Las hojas remiten a los gestos y las lecturas que se pueden establecer de éstos. Me interesa pensar en la arbitrariedad de los códigos que crea el arte en torno a sí mismo. Es decir, el valor que adquieren tales gestos hechos por alguien que intenta no ser invisible”.
Rosario Carmona Yost, licenciada en artes con mención en Artes Visuales (2002-2005) y Magíster en Artes (2006-2007), Universidad de Chile. Ha participado en una gran cantidad de exposiciones colectivas como en el Museo de Arte Contemporáneo de Valdivia, IV Bienal de Beijing de China (2010), Matucana 100, Museo de Arte Contemporáneo, Galería ANIMAL, Santiago (2009), para nombrar las más recientes, e individuales entre las que destacan: Galería Moro (2010), Galería Die Ecke (2009) y Galería BECH (2008). Ha participado en las ferias Ch.aco (2009, 2010), arteBA (2009, 2010), SCOPE Miami, Estados Unidos (2009), CIJE Beijing, China (2009), ArtBo Bogotá, Colombia (2009). Se ha desempeñado como docente en las Universidades Uniacc, Andrés Bello, del Desarrollo y Vicente Perez Rosales.
Paralelamente en la terraza se presenta el conjunto TURBOPLASMA (Gabriel Del Favero y Eric Schiodtz) con el proyecto titulado Strange Days: Hipercubo Equilibrium. Según explican los artistas, el fundamento de esta obra es el hecho ocurrido en 1912 cuando Duchamp, después de ver una exposición de tecnología aeronáutica, le dice a Brancusi: “La pintura ha muerto. ¿Quién podrá hacer algo mejor que esta hélice? Dime, ¿serías capaz de hacerla?”. A partir de este comentario, los artistas desarrollaron una propuesta que consiste en abordar la idea de utopía futurista.
Según explican los artistas, “a lo largo de la historia, las utopías han buscado la definición de sociedades ideales. Por otra parte, el futurismo utópico es una denominación que aparece en el siglo XIX hasta nuestros días, teniendo una estrecha relación con la ciencia ficción. Se manifiesta principalmente en productos culturales como en la arquitectura, diseño, comic y novela. Alimentado por la corriente positivista tuvo un especial auge en el periodo de entre guerras, es por eso que se le asocia a los momentos de crisis que depositan una gran confianza en la revolución tecnológica como artífice del progreso material y social”.
“Marx acuño el término sublime tecnológico para criticar esta tendencia. Antes de la guerra se pensaban en megalópolis y máquinas imponentes, sin embargo, tras la segunda Guerra Mundial existió una desconfianza hacia estas ideas futuristas”, agrega Gabriel Del Favero. “La máquina y el avance tecnológico que supone debían traer prosperidad y facilitar el trabajo y la vida del hombre, se había transformado en el principal motor para facilitar la muerte. Las ideas del futurismo utópico vuelven a tomar fuerza con la carrera espacial. Incide en los nuevos inventos, se van utilizando nuevas tecnologías y van surgiendo y planteando hipotéticas aplicaciones que por lo general tienden a un exceso de fantasía. Esto ilustra bien el dilema del artista plástico que se enfrenta a las realizaciones de una era industrial en pleno auge y de su incidencia en la vida cotidiana”.
Para el conjunto Turboplasma, estos antecedentes son la plataforma del proyecto que consiste en la realización de una escultura aerodinámica que se encuentra en estado de construcción: una serie de piezas de metal y concreto dispuestas sobre la superficie, y la mitad de un objeto metálico sostenido por andamios y elementos propios de la construcción. A espo se suma un sistema sonoro que se activa con la presencia del espectador, utilizando sensores dispuestos estrategicamente en el lugar.
Gabriel Del Favero, (1980 Roma, Italia). Titulado en Licenciatura en Artes Plásticas, Mención Pintura, Universidad Finis Terrae (2005). Taller de Artes, con Eugenio Dittborn (2005). Diplomado Cine, Universidad Católica (2008). Ha participado en una gran cantidad de exposiciones colectivas, e individuales en Salón Tudor (2010) y Montecarmelo (2008). Se ha desepeñado como profesor en las Universidades Andrés Bello (2009, 2010) y Finis Terrae (2009). También ha participado en la dirección de videos del artista Sebastián Mahaluf y músicos, además de crear ilustraciones para discos.
Eric Schiodtz Guasch, (1981) titulado de arquitecto de la Universidad Finis Terrae (2007). Actualmente se desempeña de jefe de proyectos de la Constructora Martinez Jaca. Paralelamente es profesor aydante en la Universidad Finis Terrae.
Enviar un comentario nuevo