MUSEO NACIONAL DE BELLAS ARTES, ROBINSON MORA
Exposición de Robinson Mora, 10 de agosto al 2 de octubre
Del Interior
Después de 12 años, el artista chileno Robinson Mora vuelve a exhibir en el Museo Nacional de Bellas Artes su trabajo caracterizado por una abstracción geométrica que rescata con un cromatismo intenso los paisajes patagónicos de Chile. En esta ocasión, en la exposición Del Interior presenta alrededor de 40 óleos realizados entre 2006 y 2011 en el Ala Norte del primer piso del museo, entre el 10 de agosto y 2 de octubre.
Robinson Mora (Linares, 1947) ingresó a la Escuela de Bellas Artes y al Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, en 1965. Desde los veinte años adhirió a los postulados de la pintura geométrica abstracta. En 1969 fue invitado a ingresar al movimiento geométrico Forma y Espacio.
En 1970 se tituló como Profesor de Estado en Artes Plásticas y desde el año siguiente reside en Coyhaique.
Sus obras llevan títulos vinculados al lenguaje técnico comunicacional, haciendo analogía a la capacidad de receptividad y comunicación entre el hombre y su interior y entre el artista y el espectador. Mora intenta así establecer un vínculo entre su personal percepción del paisaje y la que intuye como existente en el subconsciente de todos los seres humanos.
Aunque la figuración está ausente en su obra, las formas abstractas geométricas se hacen reconocibles al espectador a través de particulares efectos de luz que sugieren amplios espacios cósmicos y atmósferas misteriosas ligadas a los paisajes patagónicos y a vistas aéreas panorámicas del planeta.
El paisaje austral y el estilo de vida de la apartada ciudad de Coyhaique, han influenciado su obra. La adaptación a una dimensión nueva del tiempo y del espacio le permitió consolidar un estilo muy propio, que el público pudo conocer a través de la exhibición Espacios de Patagonia que realizó el pintor en 1999 en el Museo Nacional de Bellas Artes.
Como explica el artista, sus obras son, en la mayoría de los casos, “resultados de mi subordinación a la pintura misma, indagaciones intensas de sus leyes, por así decirlo. De allí entonces que intento la ‘pictoricidad’, como alguna vez escribí, siguiendo intuitivamente lo que el cuadro está pidiendo. En su territorio se admiten elementos varios, desde la geometría básica hasta algunos ecos de mi interioridad, como también de la realidad exterior en que vivo, todos sin protagonismo, descripción ni enseñanza. Sólo el cuadro en su autonomía. También, intuitivamente, atisbo cruces de mis pinturas con las coordenadas plásticas que el ser humano lleva en su armazón interior. Para lograr esos cruces, laboro diariamente”.
Más información sobre el artista:
http://www.robinsonmora.cl
Enviar un comentario nuevo