NOVELA: YO BIPOLAR. Capítulo XII
NOVELA: YO BIPOLAR. Capítulo XII
Todos los hombres están locos y, pese a sus cuidados, sólo se diferencian en que unos están más locos que otros.
Nicolás Boileau
Por Jesús I. Calleajas
LOS DOS Y EL OTRO
El mapa polvoriento sobre la pared necesita un chorro de limonada que le acelere senectud. Ahí aparecen nuevamente, aunque hoy han llegado con retraso. Ya me hartan.
Hombre 1:
El globo geopolítico nuevamente astillado; aumenta el número de países. ¿Qué tal? Un hormiguero cíclico.
Hombre 2:
¿No que apoyas fervientemente todos los nacionalismos sustentados por sus respetables acervos culturales?
Hombre 1:
Sí, durante mi juventud; ya no sé qué creer... Considera los años transcurridos…
Hombre 2:
Incentivamos el sincretismo económico, el concepto holístico de la ideología. Ven…
Hombre 1:
Me atraen las clásicas Atenas y Roma, pero ésta fue un imperio. Mas, cuidado: El sofisma que nos quiere vender el Nuevo Orden Mundial propone diferente denominación imperial a través de la globalización.
Hombre 2:
Concepto obsoleto. Dices rechazar la violencia pero no negarás que te seduce su nomenclatura.
Hombre 1:
Sólo como catarsis artística.
Hombre 2:
No seas descarado.
Hombre 1:
Soy pacifista… cuando me dejan. La supremacía del dinero, con su deidad la Banca, sustituye al de la espada. Visualizar la privatización del Estado, gestada durante siglos… ¿El porvenir que ofrecen sus invisibles fronteras? ¿Repetición viciosa o truco dialéctico en reserva?
Hombre 2:
¡Anacrónico lenguaje! ¡Despierta! Somos testigos y participantes privilegiados del cambio. Ser prácticos y elegir un lado; nunca sobre la cerca. Cuándo se ha visto en la historia tan dinámica interdependencia, equivalente equilibrio de fuerzas en todas las ramas de la economía: libre comercio; multinacionales; privatizaciones.
Hombre 1:
Contracción y dispersión. Absorber y expeler. Análogo a los movimientos telúricos… Imperios que se suceden a los nacionalismos; de nuevo nacionalismos; de vuelta a los imperios, hasta que el soplido pierda frecuencia…
Hombre 2:
Hesse manifiesta algo así al especular sobre aspiración y espiración, Ying y Yang, en El juego de los abalorios. Dicotomía que a todos ha contaminado en este bloque civilizatorio.
Hombre 1:
Si insinúas que plagio te equivocas: faltan aún diez años para que lea ese inconmensurable monumento a la alquimia espiritual. Cíclico. ¿El eterno retorno de los hindúes y Nietzsche? En la antigüedad armas y enemigos visibles… Ahora, la debacle. Abominable concepto de división geográfica. La globalización reveló su planta en la historia con la Primera Guerra Mundial…
Hombre 2:
Te compadezco. Se ve prístino: Terminarás en un manicomio o suicidándote. Tienes la alternativa. Además, piensa en lo bien que te sentirás, como pez en el agua, en la nueva organización de un estado que favorece el “individualismo”. Y, lo mejor: contamos con la revolución informática, ¿qué más necesitas? Tan egoísta y con el mundo en tus manos desde tu casa…
Hombre 1:
Tentador. Te juro que casi, casi me convences. Y, lo admito, la competencia tiene su atractivo... es, sin saber por qué, subyugante… ¿No dicen que el poder es sexy? Deliciosamente frívolo y sin proteínas de culpabilidad... Admito que no sé responderte… Las naciones actuales convertidas en corporaciones internaciones, cabestros del nuevo imperio… Dame algunos días. Nos espera la devastación…
Ambos se sumergen en el mapa con rapidez. Desparramados calendarios. Odaliscas versus castillos medievales. Consignadas actividades escasas: Las píldoras diarias, la cita con el psiquiatra, rentar y devolver audiovisuales a la biblioteca. No programo horario de alimentos; la rutina biológica me dice lo que necesito y cuándo. ¡Cuidado con quemar las ollas!, leo en carteles. El de las islas griegas es más que decorativo: me hace añorar diez años: ¿estuve acá insomne; viajé sitios sin saberme? ¿Qué sucedió hace diez años? ¿Qué ingreso clínico ocurrió? ¿Dónde estoy? ¿He escrito esto o lo estoy pensando? ¿Anticipo los fatales diez años? No puedo recordar sino a retazos; y lo peor: no puedo definir qué es "real" y qué no lo es. ¿Es todo lo mismo? ¿Dioses contra dios? Cronos venció a Urano y Zeus a aquél.
Los libros doblegan mi cabeza contra el metal. La desconfianza triunfó, contribuyendo a empeorar mi neurosis, a que me apartara, si bien provisionalmente, del misterio artístico para tantear el campo minado de lo conceptual, terreno vedado a mis limitaciones. Me dije: Padezco no dos crisis sino tres: la existencial, la circunstancial y la epistemológica. Tal vez sean dos crisis y la tercera no sea tal, sino síntesis y por eso me siento psíquicamente molido en una especie de trampa dialéctica… o falsamente dialéctica. En fin, lo que fuera me impelió a tormentosamente asomarme al complicado estructuralismo de Barthes y Foucault, y la deconstrucción post-estructuralista de Derrida para pretender indagar en los yerros de la cultura histórica que compartimos.
Fatal: De inmediato las bujías comenzaron a entrar en peligrosa combustión y desistí. Desmontar, desarticular, o deconstruir el escuálido aparato de mi desempeño psicosocial ha supuesto tarea olímpica de la que han quedado sus inútiles piezas dispersas en una guardería pueril. Claudicar ante la supremacía del desconsuelo, que irreductible me asienta desvergüenza consular. Pulveriza el hematocrito intelectual. Ni mierda sé de complejidades lingüísticas, de metalenguaje, de semiología. Entonces, ¡jódete, por bruto! Sólo puedo errar, zigzagueando sobre la ancha calva del mapa devastado. María Eugenia, casada con un compañero burócrata (de ella, los míos siempre los mantuve a distancia) considera mudarse al oeste, me ha comunicado Rosario que se la encontró en un supermercado. Lucía más rubia… Raiza terminó su carrera de enfermería y se involucró con un pediatra. Médicos superestrellas; algunos compiten con los roqueros en la nueva popularidad de ciertas profesiones.
No sé si me convertiré-o lo fui- en perro, gato, tiburón, cebra, caimán, coleóptero, flor. Si no creo en evolución ni re-encarnación a qué viene esta cháchara. La lista de los empleos… Larguísima; además, no recuerdo bien la secuencia… No importa; es necesario consignar esa infamante sucesión de paradas en el vía crucis. Horas de ventana y más ventana... Las conexiones telefónicas, arterias desgarradas, créense además enrejados ventanales, de los inexpugnables. No sé por qué, además de las Kessler, me persigue la visión, que misteriosamente ignoro si he visto o soñado, de Julia pariendo un edificio de cincuenta pisos. Cada vez que está a punto de soltar la azotea entre las piernas queda petrificada allá arriba como si la asaltara un épico ataque de estreñimiento.
Capítulos anteriores:
Capítulo I en: http://revista.escaner.cl/node/7153
Capítulo I en: http://revista.escaner.cl/node/7174
Capítulo III en: http://revista.escaner.cl/node/7231
Capítulo IV en: http://revista.escaner.cl/node/7294
Capítulo V en: http://revista.escaner.cl/node/7314
Capítulo VI en: http://revista.escaner.cl/node/7356
Capítulo VII en: http://revista.escaner.cl/node/7393
Capítulo VIII en: http://revista.escaner.cl/node/7432
Capítulo XIX en: http://revista.escaner.cl/node/7472
Capítulo X en: http://revista.escaner.cl/node/7490
Capítulo XI en: http://revista.escaner.cl/node/7526
Novela Yo bipolar, de Jesús I. Callejas, publicada en formato digital en http://www.bookrix.com/_ebook-jesus-i-yo-bipolar/Fecha de Publicación: 01-21-2013
@copyright Prohibida su copia sin la autorización del autor.
http://www.bookrix.com/-jesusicallejas
Email sibaritamito@gmail.com
Jesús I. Callejas (La Habana,Cuba, 1956) ha publicado los siguientes libros de relatos: Diario de un sibarita (1999), Los dos mil ríos de la cerveza y otras historias (2000), Cuentos de Callejas (2002), Cuentos bastardos (2005), Cuentos lluviosos (2009). Además, Proyecto Arcadia (Poesía, 2003) y Mituario (Prosemas, 2007). La novela Memorias amorosas de un afligido (2004) y las noveletas Crónicas del Olimpo (2008) y Fabulación de Beatriz (2011). También ha reseñado cine para varias revistas locales como Lea y La casa del hada, así como para otras publicaciones. Recientemente ha publicado los trabajos virtuales Yo bipolar (novela) y Desapuntes de un cinéfilo (2012), que consta de reseñas y elementos de la historia del cine. Callejas es descendiente de Manuel Curros Enríquez, junto a Rosalía de Castro, el mejor poeta de lengua gallega.
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