Retrato de una Presidenta: Arte, género y política en la obra de Andrés Ovalle.
Retrato de una Presidenta
Arte, género y política en la obra de Andrés Ovalle
Por: Ximena Jordán. Email: ximejordan@gmail.com
Cuando me enteré de la exposición Retrato de una Presidenta del artista porteño Andrés Ovalle, me la describieron como una serie de retratos en acrílico sobre lienzo acerca de la primera presidenta de Chile, Michelle Bachelet. Esta descripción no me atrajo de forma particular. Los primeros mandatarios han sido retratados oficialmente por centurias y me fue inevitable caer mentalmente en un lugar común con respecto a esta muestra pictórica. Pensé me encontraría con algo ya conocido por mí, al menos en forma parcial. Afortunadamente, mi curiosidad fue más fuerte y prontamente fui a visitar la exposición de esta serie de pinturas que se realizó el año 2010, con motivo del Foro Internacional de las Culturas. A los breves momentos de haber llegado a la muestra, me percaté sin esfuerzo alguna que una cosa fue escuchar hablar de estas serie de retratos presidenciales de Andrés Ovalle... y otra diametralmente distinta, fue admirarlos en vivo y en directo.
Desde la primera vista, Retrato de una Presidenta fue una selección pictórica que me sorprendió. Compuesta por quince obras de acrílico sobre lienzo en formato grande (como promedio de medida de las obras podríamos establecer 1.5 mts. por 1.5 mts. en cada una de ellas) antes de observarla en su completitud y de entenderla en su complejidad, la sola experiencia estética ofrecida por estas obras es cautivante. Recuerdo perfectamente el momento en que ingresé a la sala de exposición y empecé a observar las primeras obras. Casi no lo podía creer. Semejante vivacidad, colorido y desvergonzada creatividad constituían un resultado insólito en una serie de obras que perseguían mostrar a través de los ojos de un artista, una propuesta estética para nuestro primer gobierno de supremacía femenina. Consiste en una propuesta de arte visual que se aleja ostenciblemente del conceptualismo y se acerca a la sensibilidad postmoderna, término acotado por el teórico español Simon Marchan Fiz en su libro Del Arte Objetual al Arte de Concepto (1994). De acuerdo con este tipo de sensibilidad presente en ciertas producciones artísticas posteriores a la década del '80, las obras que componen la serie Retrato de una Presidenta se dan a conocer al espectador significativamente mejor a través de los sentidos del espectador que por medio de la explicación de su contenido conceptual, indicado por lo general en los textos asociados a la misma (como este).
Michel Bachelet fue la primera mujer elegida presidente en un país sudamericano. Sin perjuicio de la trascendencia de este cargo, Andrés Ovalle no pinta a la primera presidenta en su calidad de presidenta, sino que pinta a Bachelet "como la mira Ovalle". Lo más interesante al estar frente a las obras, es distinguir cuáles miradas de Ovalle convergen con las nuestras y cuáles rasgos estéticos, tanto reales como imaginarios, se presentan en esta exposición como evidentemente “Bachelísticos”, sin que nosotros los hayamos detectado anteriormente y que sorprendemente fueron manifiestos a la mirada del artista. Asimismo, al mirar las obras resulta inevitable especular acerca del proceso de investigación conceptual y visual que tuvo que emprender el artista para poder llegar a semejante conclusión pictórica cargada de seguridad, mensaje y audacia.
¿Cómo se pinta a una Presidenta?
Para la consecución de la serie de obras Retrato de una Presidenta, Andrés Ovalle realizó un seguimiento pictórico durante los tres primeros años de mandato de Michelle Bachelet. Observó a la presidenta en su variedad de apariciones públicas y mediáticas, se documentó acerca de su pasado y su presente personal y político, la miró con ojos de niño y con ojos de adulto, con mirada políticamente crítica y humanamente comprensiva.
El resultado: una serie de representaciones pictóricas no oficialistas que tienen como referente primario temático-visual a un gobernante político. Es sin duda, la primera de su tipo realizado en Chile y probablemente lo sería en muchas otras naciones si en ellas se realizase una obra de este tipo. Esto, porque en los retratos pictóricos de los primeros mandatarios, realizados contemporáneamente al mandato de los mismos, ha primado históricamente la opción oficialista. Retratar artística y libremente a un líder político en el periodo mismo del ejercicio de su poder y -por si esto fuera poco - lograr hacerlo manteniéndose al margen a todas las imágenes mediáticas y a los discursos descriptivos convencionales es una empresa artística osada y con riesgo de fracasar tanto artística como mediáticamente. Por esto mismo, los artistas chilenos no habían optado por emprenderla. Hasta que Andrés Ovalle lo hizo. Y lo logró.
En varias obras de la serie Retrato de una Presidenta vemos a Michelle Bachelet retratada en espacios privados y especialmente íntimos. Esto rememora una corriente pictórica europea de principios del siglo XX denominada Intimismo, la cual se centró en la representación de personajes en escenas de su vida cotidiana que son llevadas a cabo por los individuos en privado, tales como rutinas de tocador, ensayos de vestiduras frente al espejo, lectura en silencio, etc. La mayoría de los protagonistas de las obras de estilo intimista fueron mujeres, hecho que se refleja en el acervo pictórico de uno de los más conocidos exponentes de este estilo, el francés Pierre Bonnard (1867-1947). Considerando que la serie Retrato de una Presidenta se relaciona tan cercanamente con el post-modernismo pictórico como con el Intimismo francés, podríamos calificar al estilo de esta obra como un intimismo postmoderno, haciendo la salvedad de que esta calificación no es producto (aún) de una convención académica sino de la manifiesta relación visual de estas obras con estas dos corrientes pictóricas que la anteceden y con las cuales se conecta desde el punto de vista tanto temático como visual.
¿Será que las mujeres generamos en el sexo opuesto una curiosidad por lo que ocurre en nuestros espacios y momentos personales? Aquello que no exteriorizamos en nuestros instantes de mayor abatimiento, parece ser lo de mayor inquietud para el ojo pensante del pintor masculino. Tal es el caso de Andrés Ovalle con respecto a los Retratos de una Presidenta. Ovalle se pregunta sobre el lienzo acerca de qué sucede en el ser interno de la líder chilena, cómo se siente cuando nadie la ve, en qué consiste su semblante pensante y sintiente al alejarse de la veta de lo público para relegarse a ser quién ella realmente es. Indaga en la Bachelet como persona, y por ende, como mujer.
Y es que ninguna mujer parece librarse del rol genérico determinado por el mero hecho de haber nacido mujer. Pareciera que nuestro género nos otorga una doble calidad ontológica: la de ser humano y la de “ser mujer”, siendo esta última estéticamente inagotable. Será por esto que es difícil concebir una serie de obras como las que encontramos en Retrato de una Presidenta, pero teniendo como referente a un presidente hombre. Para hacernos una mejor idea de cómo esto sería, contemplemos estas obras de Andrés Ovalle e imaginemos una serie de pinturas equivalentes a las mismas en colorido, formato, tema y libertad de contenido, pero teniendo como modelos a pasados primeros mandatarios chilenos tales como Bernardo O’Higgins, Salvador Allende, Ricardo Lagos…resulta difícil de concebir la creación de ese tipo de obras ¿cierto?
Lo femenino, hasta el sillón presidencial
De esta manera, con la creación de la brillante seria pictórica Retrato de una Presidenta, Andrés Ovalle orienta la mirada del espectador hacia el aspecto estético de un fenómeno que aparentaba ser únicamente político y social. La elección de la primera suprema líder política chilena, es también el aparecimiento de una estética femenina en el poder supremo que hasta ese momento histórico, era desconocida en Chile. La estética de un poder maquillado, la de un poder al cual sus subordinados le observan la manera de vestirse, de caminar, de mirar y de posar. Independientemente de la crítica sexista que se podría hacer a esta reacción, es un hecho que es lo que evidentemente sucede. Es, también, un fenómeno de tipo genérico y perceptual con el cual Andrés Ovalle, entre otros asuntos, confronta visualmente al espectador de Retrato de una Presidenta.
Interesantemente, es necesario precisar lo siguiente. Cuando viene de sus mismos adherentes, este cuestionamiento por "cómo se ve hoy la presidenta" se traduce generalmente en una mezcla de admiración y curiosidad. Podemos afirmar que dicha es la mirada de Andrés Ovalle. Sin embargo, cuando proviene de sus oponentes, las agudas observaciones hacia el look de la Presidenta de la República devienen en crítica estética objetada como argumento político. Así es como, durante el mandato de nuestra primera presidenta, escuché en repetidas ocasiones a muchos opositores de su liderazgo descalificar su gestión (con la voz y la propiedad de una analista político) utilizando frases tales como: “la presidenta es gorda”, cuando Bachelet jamás fue una mujer gorda para el promedio de las mujeres chilenas de su edad. Bachelet “no se viste bien”, cuando sus vestiduras conforman el típico atuendo de las abogados en nuestro país. Bachelet “ocupa lentes”…de este último comentario no me rebajo a hacer observación rectificadora alguna, por razones obvias. Con esta crítica observación, no estoy tomando partido de una controversia política determinada, pues eso sería parte de otro artículo. En esta oportunidad, tan solo estoy haciendo notar que, nos guste o no nos guste, el ser portadoras de una estética femenina que de alguna u otra manera nos identifica y acerca de la cual quienes nos rodean opinarán, es algo de lo que no nos libramos por el mero hecho de ser mujeres.
Las mujeres, tenemos que vernos bien, a los ojos de quienes nos quieren y a los ojos de quienes no. Si no lo hacemos, se nos exigirá tarde o temprano, directa o indirectamente, que lo hagamos. Y como no es posible satisfacer las expectativas estéticas de todos, pues aparecerán los comentarios. Inevitablemente. Es nuestra tarea personal mantenernos inmunes a ellos, conservando una seguridad y estilo que nos satisfaga prioritariamente a nosotras. Y de paso, a quien más le guste.
A más presidentas, más arte presidencial
Andrés Ovalle continúa su trabajo con el proyecto Presidentas de América el cual permitirá darle exposición internacional a nivel latinoamericano a las obras que conforman Retrato de una Presidenta y asimismo complementar este proyecto de arte con la representación visual de las mujeres presidentes que procedieron en nuestro continente al nombramiento de Michelle Bachelet, tales como Cristina Kichner en Argentina, Laura Chinchilla en Costa Rica y Dilma Rouseff en Brazil. Para apoyar esta nueva empresa artítisca de Andrés Ovalle y sobre todo para disfrutar en formato digital de esta innovadora propuesta de retrato de poder político, los invito a consultar el blog oficial de este proyecto pictórico de Andrés Ovalle: http://retratodeunapresidenta.wordpress.com/.
Cabe mencionar que con la re-elección de Michel Bachelet como presidenta de Chile el recién pasado año 2013 y con la asunción oficial de la misma al poder el próximo 11 de Marzo del presente año 2014, tanto las obras que componen Retratos de una Presidenta como la temática genérico política que de las mismas se extrae, retoman su vigencia y se actualizan con respecto a las nuevas expectativas a lo que será la mirada de los chilenos hacia su, otra vez, Presidenta de la República.
La constante producción artística de Andrés Ovalle se extiende en una producción mucho más amplia, que el fragmento presentado en el presente artículo. Andrés Ovalle produce e innova de manera constante, abarcando otras vertientes técnicas y temáticas tan interesantes, originales y osadas como la serie Retrato de una Presidenta. Para quienes se interesen en investigar más de su obra, por favor ingresar en los siguientes enlaces:
Ximena Jordán
Master in Art Curatorship, Melbourne University
Licenciada en Estética PUC
Imágenes: facilitadas por el artista Andrés Ovalle a través del blog http://retratodeunapresidenta.wordpress.com/
Contacto del artista:
Powered by Qumana
El artículo me pareció muy
Nunca se me hubiera ocurrido
Me pareció un artículo muy
En cuanto a la obra de Andres
Bueno antes que nada
El tema que se desarrolla en
["MIRA, una mujer presidenta.
En primera instancia me
Es atractiva la obra de
Es muy interesante la visión
La obra de Ovalle llamó mucho
Mónica Zoraima Godínez Alva
Es interesante como un
Para mi, poco conocedor de
De entrada el nombre no me
Lo que realiza Ovalle es
Las pinturas me parecieron
En la muestra pictórica
Realmente quizá Ovalle quiso
Me gusto la obra... bien
Es significativo que la mujer
Para mi es un estilo de
La obra me pareció muy
Leer el titulo me hizo pensar
de manera personal creo que
Andres es un artista que reta
El papel de la mujer en el
Las obras de "retratos de una
Ovalle nos permite disfrutar
Ovalle llena los sentidos de
Enviar un comentario nuevo