KATNIRA BELLO, ARTE ACCIÓN Y FRAGMENTACIÓN

Katnira Bello (México, 1976) realiza performance continuamente desde 1995. Pero también fotografía y video. Ha escrito textos publicados por concurso; algún ensayo que ha aparecido en periódicos de Argentina; funge como editora del libro de documentación de performance del fotógrafo Antonio Juárez (por publicarse próximamente);  ocasionalmente realiza diseño gráfico y web. Ha hecho un poco de animación; ha participado en al menos nueve colectivos artísticos y/o políticos; ha documentado eventos de performance; ha experimentado en edición sonora; no tan a menudo realiza instalación, collage, dibujo;  ha impartido talleres sobre libro objeto, fotografía, performance, dibujo, surrealismo y arte contemporáneo; ha colaborado en corrección de estilo de numerosos textos y ha buscado buena familia para  13 revoltosos gatos huérfanos.

Se confiesa diletante desde que tiene memoria. Si bien lo negó por mucho tiempo, parece ya no sonarle tan pecaminoso.

                       “… aunque en definitiva no es un atributo del que pueda presumir.”

Diletante incluso dentro de las disciplinas. Por ejemplo, su obra de performance pasa por lo ritual, lo lúdico, lo político, lo personal, lo minimal, lo abarrocado, lo crítico y lo críptico también. No por falta de seriedad sino por la imposibilidad de efectuar un matrimonio con un solo tema, con un solo interés, con un solo modo de hacer, con una sola forma de ver; especialmente cuando existen tantas posibilidades dentro de cada persona.

Quizá más que hablar de diletantismos se podría hablar de abanicos. Abanicos de posibilidades. 

“¿Dónde empieza una idea y a dónde se dirige? ¿Realmente se detiene o decidimos simplemente quedarnos con un fragmento de su paso?”

Para Katnira el acto creativo se trata de un juego múltiple donde cada opción probable equivale a un tiro de dados. Puntos de intersección o dispersión, ahí donde una idea llegó a término podrían iniciar diez más.

Actitud en cierto sentido común en los artistas contemporáneos. Hacer un poco de varias cosas, retomar de varios puntos, ir, venir, probar, comprobar, retomar, hacer, deshacer y empezar otra vez. Interrelacionar temas y objetos de una instalación para idear un performance; desprender proyectos fotográficos de las acciones; empezar videos a partir de un texto que apareció originalmente para explicar una foto, son algunos de los procesos con los que suele trabajar. Más por costumbre que  por método.

En 2006, dando continuidad al trabajo iniciado de manera colectiva en 1997, realizó una acción continua paseando por la Ciudad de México con un vestido hecho por completo de propaganda electoral justo durante los días de contienda y posteriormente durante el largo (e inevitablemente cuestionado) periodo durante el cual todo el país debió esperar a que un Tribunal Electoral atinara a dar una resolución sobre cuál candidato había sido electo como presidente.

El vestido tenía la intención de cuestionar el sistema electoral de un modo simple. El tema era un punto específico: ¿Qué es lo que nos proponen los políticos? Además de una blanca e impecable sonrisa con los colores de sus partidos de fondo, poco o nada saben los electores de las intenciones, intereses, experiencia, ética y propuestas de los candidatos. La propaganda son solo imágenes, colores y mucha basura. Katnira recicló este material para construir un colorido vestido de fiesta y pasear sonriente. Un visible gesto sin mensaje específico, un acto extraño vacío de contenido intencionalmente. Una acción que generaba el contenido y la crítica a su alrededor, simplemente por dar una excusa para retomar un tema del que los ciudadanos parecían haberse cansado.

La acción se llevó a cabo durante varios días pero la documentación corresponde a un solo día en torno a las calles del Centro. La gente se acercaba a preguntar si se trataba de propaganda de algún otro partido que no conocían, ya que la idea de usar candidatos como trapo debía provenir de otra competencia. Muchas personas se acercaron a dialogar sobre la sucia campaña electoral, otros a preguntar si había un desfile cerca, si modelaba para algo, si anunciaba o estaba haciendo algo. Todos preguntaban el qué, el para qué, el quién pagaba. La respuesta era simple: “Nada. Nomás (sic) me paseo”. La crítica, el diálogo, el cuestionamiento, las propuestas nuevas, venían entonces de la gente que daba opiniones e iniciaba charlas al respecto con sus acompañantes.

Igualmente durante esa temporada electoral que inundó las calles con propaganda, se dio a la tarea de recorrer diversas colonias fotografiando algunos accidentes textuales que ocurrían entre el texto de los anuncios y los nombres de las calles o la situación en que se encontraba dicho anuncio. Del mismo modo recopiló algunas intervenciones urbanas que se habían realizado sobre la propaganda.

Otra acción harto escandalosa sucedió en un evento caserotitulado MUDAO7 Arte Acción. Organizado por Toti[1], quien tras su mudanza invitó a algunos amigos a realizar performances en su departamento vacío. Katnira escogió el baño donde tomó una ducha fría de varios minutos mientras iba inflando globos blancos hasta reventarlos, de tal modo que la explosión dentro del baño resultaba potenciada como en una caja de resonancia.

Una pieza reciente de performance[2] consistió en pisar gises que dejaba caer al suelo mientras masticaba y escupía rosas blancas, caminando hacia atrás dibujaba a su paso una espiral que se iba a abriendo.

Su interés en construcciones que surgen aparentemente por azar, siendo este el punto central del que desea surjan las lecturas de la pieza, está también presente en el video “Araña”. El cual forma parte del proyecto colectivo VideoLotería[3] (2007 – 2008) que consistió en retomar las cartas de la Lotería como punto de partida en la creación de videos de tipo experimental, performático, animación, documentación y narrativa.

Una de las últimas acciones presentadas por Katnira sucedió en el Faro de Tlahuac[4], con motivo de su primer aniversario[5]. La pieza consistía en rodar por el espacio (jardines, camino empedrado, pasillos, galerón, baldío y lago) un pesado carrete que era del tamaño de la artista. Jugando a modo de broma con la escala y la tensión física que se generaba entre un objeto tan grande y una mujer de apariencia frágil, que aún así lograba manipular el carrete.

Como parte de su trabajo de performance ha impartido algunos talleres de arte acción en X Teresa Arte Actual y está en trámites el poder realizarlos en algunos otros espacios menos especializados en esta área, lo cual en cierto sentido amplía fronteras. El primer taller estuvo centrado en disparar ideas a partir de objetos e intereses personales, mientras que el segundo se enfocó en el cuerpo como origen de los proyectos.

Durante el mes de noviembre de este año, algunos de los participantes en estos talleres se presentarán en la próxima Bienal de Poesía Visual, en el módulo correspondiente a la UAM Azcapotzalco.

Otra vertiente que tiene el arte acción en el trabajo de Katnira se encuentra en algunas series de Autorretratos que se realiza a la mitad de un evento cotidiano, como parte del registro de los días. Momentos de ocio, acercamientos al cuerpo, fragmentos del Yo en formato rectangular.

Estos proyectos autoreferenciales también han derivado, algunos pasos y vueltas alrededor después, en dialogar sobre la feminidad y las posturas del deseo. ¿Cómo y cuándo una mujer se siente particularmente atractiva? No a la vista masculina sino a la suya propia, cuando están a solas.  Este proyecto inició en 2006 y pretende continuar en 2009, luego de tres años de esperar en el cajón. Otro proyecto encajonado desde esas fechas y que también promete salir del closet próximamente consiste en  autorretratos siendo otra persona, quién amablemente colabora prestando su ropa, su espacio, sus gestos. Este proyecto pretende cuestionar los elementos que conforman la personalidad fuera del cuerpo, los objetos, los lenguajes corporales. Otra forma de acercarse a la otredad.