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REVISTA VIRTUAL DE ARTE CONTEMPORÁNEO Y NUEVAS TENDENCIAS

ISSN 0719-4757
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MICHEL FOUCAULT - HACIA ATRÁS
(Dos de Tres partes)

Por Felipe Vilches Rubio

EL AVANCE DE SUS IDEAS. Historia y Sistemas de pensamiento.

En su trayecto mostro que las ideas básicas que la gente considera permanentes sobre la naturaleza humana, cambian a lo largo de la historia. Su posición intelectual fue siempre muy sólida, estudió filosofía occidental y psicología, y durante la década de 1960, encabezó los departamentos de enseñanza de la filosofía de las Universidades de Clermont-Ferrand y en Centro Universitario Experimental de Vincennes. Afirmaba que el dominio que trae consigo a la persona, la concepción de las cosas que tienen sus ventajas y sus peligros: el mundo cambia con las ideas-acción que iluminan al mundo. nSus anuncios puso en tela de juicio la influencia del filósofo - político Karl Marx y del psicoanalista Sigmund Freud.

El documento elaborado en 1985, (ver parte uno) tenía una introducción que destacaba los silencios históricos comprensibles A) la muerte del Hombre a través de “Dios ha muerto” y B) el control del comportamiento por la educación señalando a las Instituciones como poder no-discursivo, - gracias a un conocido que me alentó a codificar las ideas importantes que Foucault pone en escena- pudo desarrollar la observación sobre el lenguaje a través de ideas evaluadas históricamente críticas-, puse mi experiencia de Nietzsche, retomando a Marx y rebuscando en Freud para el feliz choque con las raíces filosóficas de Foucault.

Desde Nietzsche en adelante, surgieron Antonin Artaud, Marat Sade y Martín Heidegger como la parte del campo minado en la genealogía del sujeto. Además manejo escondidamente a Hegel y en otras continuamente está exhibiendo la autoridad de Kant, considerando el valor de las filosofías del iluminismo que era una visión de la Naturaleza, con la ilusión de un espíritu absoluto.

Para no andar a oscuras con Kant, recomiendo la exposición que hace Hegel en LECCIONES de la historia de la filosofía.
Señale – en ese estudio creativo de lenguaje popular poético y antitotalitario de algunas obras consideradas cortas y geniales de Foucault- y en donde la ciencia interpretativa tiene maestros relevantes que fueron faros de sistemas propios de pensamiento, filosofías que indagó frecuentemente y que su valor principal fue realizar el esquema preciso sobre Nietzsche, que tempranamente permite viajar con sus ideas a las suyas más propias. Con esto último, penetra la situación de la nueva imaginación frente al superhombre. Gana una gran victoria sobre el realismo subjetivo totalitario, y expone lo que sería el sistema de Nietzsche, su evolución principal, la Genealogía, Zaratustra, Humano-demasiado humano y hasta Ecce homo, un sistema de ideas, con la visión subjetiva y única de las cosas. Nuevamente la creatividad veía nuevos horizontes dentro del pensar más corrosivo y encantador: la filosofía de la historia.

En 1970 fue un destacado momento nacional cuando Foucault es elegido para el puesto académico más prestigioso en Francia, con el título de profesor de Historia de los Sistemas de Pensamiento. En las décadas 70-80, su reputación creció gracias a las numerosas conferencias y cursos que impartió por todo el mundo.

Las principales influencias siempre fueron los filósofos alemanes Nietzsche y Heidegger, este último marca el estilo de reflexión del ensayo “El pensamiento de Afuera”. Allí exploró los modelos cambiantes de poder de la sociedad y cómo el poder se relaciona con la persona. Investigó las reglas cambiantes que gobiernan las afirmaciones que pueden ser tomadas de forma seria como verdaderas y falsas en distintos momentos de la historia.

Estudió también cómo las prácticas diarias permiten a la gente definir sus identidades y sistematizar el conocimiento; los hechos pueden ser entendidos productos de la naturaleza, del esfuerzo humano y de Dios.

Con apego a Nietzsche mantenía que la conducta humana está motivada por la voluntad de poder y que los valores habían perdido su antiguo dominio opresivo sobre las personas.

Cabe destacar la profecía que cubre el Teatro Filosófico editado en 1970, designa el futuro bajo la nueva lógica para comprender nuestro siglo. Es la profecía extraída de la mentalidad que encierran los ensayos de Gilles Deleuze, a saber “Diferencia y Repetición” y “La Lógica del Sentido” (1969). Los comentarios sobre estas obras muestran la cara escondida del pensamiento herético inspirado en Nietzsche y aparte la figura de Deleuze de los signos mayores de nuestra época, lo separa de Antonin Artaud.

El mundo esta ajustado a la búsqueda mística, igual que la visión nihil erótica de Bataille tan singular y también del propio signo que representa Nietzsche.

Establece que el pensamiento con su método deleuziano mayor es el más signo excesivo tendría la lógica de mayor resonancia enigmática. Que lógica se enfrentaría a su percepción: “Y que por muy precipitado que sea más, pronto, lo demasiado tarde, que no dice nada. Siempre está allí, desajustando, punto por punto, a todos los más pronto.”.

Recordemos que Nietzsche estaría sistematizado en 4 grandes obras, la liberación anti nihilista, nace la valentía para soñar la nueva lógica. Ella definitivamente se estableció, -a mi entender en la obra ESTUDIOS DE CINE- es un sistema de interpretación de la imagen, la Conciencia- Imagen afección y el movimiento, o sea del Cine, extensión de Tecnología Superior y Poder de Lenguaje integrado con disciplinas y experiencia de documentos reales, históricos y de ficción.

La lógica tendría un significado terrible sobre el destino, y supuestamente hay una respuesta arqueológica donde la contestación máxima de Deleuze dice: no hay corazón noematico, es una distribución de un problema de puntos relevantes, no hay ningún centro siempre son descentramientos, y serie de una a otra, vencidos por una presencia y una ausencia, de un exceso y un defecto. La sociedad tiene abandono del círculo. Este mal principio, aspira que el retorno abandona la organización esférica del todo, ya sin masa orgánica la sociedad tiene una línea recta, derecha, laberíntica, una derecha por donde todo vuelve.

Nunca antes el mundo tuvo la total ausencia de un corazón de fibrillas, bifurcaciones, insinuaciones de nuevas categorías y visiones para el siglo que viene con el espectáculo de las imágenes y se impondría su lógica del sentido.

Se mueve a favor Foucault, cuando sabe su libertad contra toda acusación posible de ilusión y que su profecía tenga plumas de idealismo.

Su proyecto filosófico siempre se disculpa de no haber bebido las aguas de Kant-Hegel, mucho más que lo necesario y lo elemental, mientras en su vida de intelectual promovía lecturas de Georges Cuvier, Bopp y David Ricardo.* Mientras “los” maestros Koyeve, -Dialéctica del Amo y el esclavo en Hegel-, y Jean Hippolyte, -Estructura y Génesis de la Fenomenología del Espíritu,- generan el ambiente para los conceptos de subjetividad transcendental, autoconciencia y opinión, descubrimiento y rito, junto a fenomenología aplicada a los sueños, al aire, al fuego etc., son aplicadas a la voluntad y la historia, a la sociedad y al hombre, (Gastón Bachelard, Cassirer y Canguihem). Esta mentalidad era contrapuesta a los maestros materialistas indiscutibles, los peces en el agua: Nietzsche, Marx y Freud.

La Lógica del sentido funcionaría más verdadera analizando la literatura y tendría su condición enigmática junto a Klossovski, y lo dicho sobre Foucault no supera lo dicho por Foucault sobre el profético Deleuze. La obra Teatro Filosófico desnuda el mayor entredicho de a quién pertenece el cetro del pensamiento en la analítica social y precisamente los 7 comentarios se dirigen a fundamentar el comienzo y la tradición anti platónica de Deleuze. Principalmente, es el éxito de la serie contra el hilo conductor en historia de la filosofía, la garantía del método del acontecer y el fantasma contra la concepción dialéctica de la historia. (Archivo, Argumento: 7 pág.)

 

 

LOS PECES EN EL AGUA, Nietzsche, Freud, Marx.
(Descripción y filiación política de Foucault.)

Una obra de formato pequeño, en sí un ensayo breve y despótico, señorial donde elabora como certeza absoluta la interpretación materialista del Signo, el Sentido y la Vida.

Esta operando las ideas centrales de los peces, y precisamente su ductilidad en su propio medio intelectual, los hacen invencibles con sistemas de pensamiento sui generis, muy cerrado y de gran extensión sobre la conducta y sus fines.

Su crítica tiene por meta diseñar el viejo sueño de describir un Cuerpo General de Conocimientos donde su centro sería una enciclopedia de técnicas de interpretación desde gramáticos griegos hasta nuestros días.(1985).

Esta tarea titánica se dirige a las sospechas generales del lenguaje que se tiene sobre la cultura indo-europea: a) el lenguaje no dice exactamente lo que dice, b) las formas inmediatas de juicios tienen sentido menor –son empalizadas y muros santos que protege su análisis -, al lado de la forma inmediata, existe la transmisión del sentido (alegórico de múltiple significado), c) el lenguaje rebasa lo verbal (c1) hay cosas que hablan y no son lenguaje: el mar, la naturaleza, los animales, las encrucijadas, el azar... y los gestos mudos, las cosas silenciosas, el tumulto que rodea, “lo de abajo” en las palabras, d) la necesidad de búsqueda de un lenguaje esencial que interprete cada forma cultural en su subsuelo programático, su sistema de lenguaje.

Este proyecto es una tabla única, opción primeriza de una hermenéutica. Contemporánea, y tendrá en los mencionados peces en el agua y la teoría del signo de Bacon y Descartes: cognitio, divinatio, simulacrum, lo entregan lo esencial del lenguaje sino una semejanza en otra de lo superficial a lo profundo y a la mala semejanza, en fin es el extravío en un gran conocimiento inapropiado para nuestra época.

Según esto, nuestros rostros fueron tapados por “Nacimiento de la Tragedia”, la “Genealogía de la Moral” (Nietzsche), “El Capital” (Marx) y la “Investigación de los Sueños” (Freud). Con ellos se interpreta, se interpretan y programan el juego de espejos de la identidad y de las acciones, donde el lector se identifica con el intérprete y este lucha por el sentido del hombre mismo. Por ello, estas interpretaciones volcadas sobre sí mismo y las grandes heridas al narcisismo humano Nicolás Copérnico, Charles Darwin y Freud, resumen los signos decisivos de una historia discontinua.

Sentencia Foucault que los peces en el agua no han multiplicado los signos del mundo. Cuando ellos nadaban el mundo no tenía signo y tampoco le dieron sentido nuevo, cambiaron en la naturaleza del signo su profundidad de espacio interior que en su acción es la exterioridad del accidente, ya que se hizo la profundidad ideal una máscara de la búsqueda pura e interior, implicando resignación, hipocresía, máscaras y disfraces.

Al ser denunciados los papeles, la profundidad de arriba es abajo.

Se imponen las distintas enfermedades enmascaradas que estaban prohibidas, por tanto el intelectual desciende y se desploma, sin peso esta abajo en el juego, es un juego de niños y un pliegue de la superficie. Tanto Zaratustra que desciende al submundo y dirige su orquesta, tanto la bruma económica es juego de capital, el valor es la mercancía que flota en la superficie. La supuesta gloria del Capital y su dificultad en desarrollarse no es tal, no tiene triunfo ni profundidad, se hace un juego continuo que quita las ideologías del camino. Produce un destete pues propone una imagen real y su desarrollo se expone sin rubor en las regiones de la locura y el puro lenguaje.

“EL PENSAMIENTO DE AFUERA”. Ensayo de Segundo Periodo, 1966.

El tema se reparte en títulos y estos en temas de acuerdo a exponer la coherencia de planos del lenguaje y actitudes valóricas. Reflexiones: 1.- Miento hablo, 2.- La Experiencia del afuera, 3.- Reflexión, ficción, 4.- Ser atraído y negligente, 5.- ¡Dónde esta la Ley, qué hace la Ley?, 6.- Eurídice y las Sirenas. 7.- El Compañero, 8.- Oh, amigos, 9.- Ni uno ni Otro.

Todo este ensayo predomina el lenguaje heideggiariano, una aplicación y especulación lógica. El primero de los temas se refiere al griego Epiménides, su argumento: Miento, hablo. Señala la relación de interioridad y época de Holderlin y Nietszsche.

En el segundo Afuera significa “Este pensamiento que se mantiene fuera de toda subjetividad para hacer surgir como del exterior sus límites, enunciar su fin, hacer brillar su dispersión y no obtener más que su irrefutable ausencia, y que al mismo tiempo se mantiene en el umbral de toda positividad, no tanto para extraer su fundamento o su justificación, cuanto para encontrar el espacio en que se despliega, el vacío que sirve de lugar, la distancia en que se constituye y en la que se esfuman, desde el momento en que es objeto de la mirada, sus costumbres inmediatas, -este pensamiento, con relación a la interioridad de nuestra reflexión y con relación a la positividad de nuestro saber, constituye lo que podríamos llamar en una palabra “el pensamiento de afuera”.” ( La Experiencia del Afuera, pág. 16.)

Que se transita hacia un lenguaje ese logos –acta de nacimiento de la razón occidental- es una grieta que se abre, “donde el sujeto está excluido”, que ha estado oculta en la teología negativa, “una experiencia semejante de lo que se trata es de ponerse “fuera de sí”, es para volverse y recogerse en la interioridad resplandeciente de un pensamiento que es de pleno derecho Ser y Palabra, Discurso por lo tanto incluso si es, más allá de todo lenguaje, silencio, más allá de todo ser, nada.” (Pág. 18) Exterioridad, significa Conciencia, esta significa vivir afuera.

 

Quien es Nietzsche. (1844-1900).
I Influencia de Shopenhauer,
II El fantasma del Superhombre,
III Del hombre superior, Analisis cap.4/

Que por idea tenía un brazo
Pero cuya mano no era más que una palma muerta
Al haber perdido sus dedos
A fuerza de matar reyes.
Antonin Artaud.

Una inteligencia precoz que se corona de brillante filósofo, poeta y filólogo alemán, cuyo pensamiento es considerado uno de los más radicales, ricos y sugerentes del siglo XX. Su padre, un ministro luterano, murió cuando él tenía 5 años, en 1849.

El futuro filósofo fue educado por su madre y en 1850 murió su hermano, y desde los seis años, Nietzsche vivió en un hogar rodeado de su madre, su abuela, su tía y dos hermanas.

Siempre temió que seguiría el destino de su padre, quien murió joven a los 36 años de un tumor cerebral. De hecho, llevo una vida disminuida por las intensas migrañas que sufrió desde niño.

Estudió filología clásica en las universidades de Bonn y Leipzig, y fue nombrado profesor de filología griega en la Universidad de Basilea a los 24 años.

La presunción de la enfermedad congénita y la ausencia de una figura paternal marcaron su vida. Su delicada salud, lo mantuvo afectado toda su vida por su poca vista y sus constantes jaquecas, le obligó a retirarse de la enseñanza en 1889.

Una década despues sufrió una crisis nerviosa de la que nunca se recuperó.

A pesar de sus problemas de salud, Nietzsche fue un escritor prolifero y publico nueve libros y preparo para su publicación otros cuatro. Obras importantes, entre ellas El origen de la tragedia (1872), Así habló Zaratustra (1883-1885), Más allá del bien y del mal (1886), La genealogía de la moral (1887), El crepúsculo de los dioses (1888), El Anticristo (1888), Ecce Homo (1889) y La voluntad de poder (1901).

I La influencia de SCHOPENAHUER. La figura paterna inspiradora fue Schopenhauer, profesor de la Universidad de Leipzig. Nietzsche fue a estudiar filología clásica, tras graduarse de la Universidad de Bonn en Teología.

Allí conoció a Schopenhauer, cuya visión metafísica no-creyente, ejerció una total influencia sobre el estudiante de Teología. Su carácter irascible y las fuertes pasiones tuvieron un gran impacto en Nietzsche, quien encontró la anhelada figura paterna.

Seducido por la independiente filosofía de Schopenhauer, Nietzsche lo identifico con una figura de integridad, su apreciación hacia el maestro se basaba en el ateísmo incondicional y honesto.

Influido por Schopenhauer, por la teoría de la evolución de Darwin y por su amistad con el compositor alemán Richard Wagner, abandono sus convicciones religiosas repudiándolas.

El desencanto con la religión se acrecentó en la medida de sus estudios clásicos adoptando los ideales griegos. Así, en el apogeo de su discurso anticristiano, declara como su dios protector a Dionisios, y sigue su inspiración para centrar la existencia en el placer sensorial.

Su inquietud en teología desplaza una moral de culpa de la educación tradicional cristiana. Su gran obra reveladora para un público que busca novedades es “La Voluntad del Poder”,, se basa en el concepto de voluntad que postula que los seres humanos están en constante conflicto con una serie de deseos que no puede satisfacer.

La experiencia estética, la contemplación de la belleza y de las magníficas fuerzas del mundo apacigua la turbulencia de los deseos, aunque en forma temporal.

Los únicos que silencian el clamor de la voluntad son los grandes santos, por medio de la resignación de la voluntad. Uno de los argumentos fundamentales de Nietzsche era que los valores tradicionales (representados por el cristianismo) habían perdido su poder en las vidas de las personas, lo que llamaba nihilismo pasivo. Lo expresó en su tajante “Dios ha muerto”.

Estaba convencido que los valores tradicionales eran una “moralidad esclava”, creada por personas débiles y resentidas que fomentaban comportamientos -la sumisión y el conformismo- porque los valores de esas conductas servían a sus intereses. Nietzsche afirmó el crear valores nuevos y su discusión sobre esta posibilidad evolucionó hasta configurar su retrato del hombre por venir, el ‘superhombre’. Donde las masas -“rebaño”, “manada” , “muchedumbre gris”- se adaptan a la tradición, mientras el superhombre es seguro, independiente y muy individualista. El superhombre siente con intensidad, pero sus pasiones están frenadas y reprimidas por la razón. Centrándose en el mundo real, más que en las recompensas del mundo futuro prometidas por las religiones en general, el superhombre afirma la vida, el sufrimiento y el dolor que conlleva la existencia humana. Su superhombre es un creador de valores, un ejemplo activo de “maestría ética”, es la independencia de alguien que está emancipado de las ataduras de lo humano “envilecido” por la docilidad, excepto aquellas que él juzga vitales.
Nietzsche sostenía que todo proyecto humano está motivado por la “voluntad de poder”.

La voluntad de poder no es tan sólo el poder sobre otros, sino el poder sobre uno mismo, algo que es necesario para la creatividad. Tal capacidad se manifiesta en la autonomía del superhombre, en su creatividad y coraje. Nietzsche negó en multitud de oportunidades que ningún superhombre haya surgido todavía, cita a algunas personas que podrían servir como modelos: Sócrates, Jesucristo, Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Shakespeare, Goethe, Julio César y Napoleón.

Al filósofo del superhombre se le reprochó a menudo ser el fruto de un intelectual que se desenvuelve en una sociedad de amos y esclavos y ha sido identificado con las filosofías autoritarias. Muchos eruditos niegan esta lectura ideológica y lo atribuyen a una mala inducción.

Aclamado poeta histórico Nietzsche ejerce mucha influencia sobre la literatura mundial, así como sobre la literatura europea y la teología. Sus conceptos han sido discutidos y ampliados por personalidades del pensamiento: Karl Jaspers y Martin Heidegger, Martin Buber, el teólogo Paul Tillich, y los escritores franceses Albert Camus y Jean-Paul Sartre.

La proclama de Nietzsche “Dios ha muerto” fue utilizada por teólogos radicales posteriores a la II Guerra Mundial, en adecuar el cristianismo a las décadas despues del 70. Asi es que Zaratustra, el alter-ego de Nietzsche clama “Aquellos cuyos padres tuviesen una inclinación por mujeres y por licores fuertes y carne de jabalí, por qué han de demandar castidad para si mismos?”.


 


MICHEL FOUCAULT - HACIA ATRÁS -  Dos de Tres (partes)

Por Felipe Vilches

Continuará la parte 3 en el próximo número de la revista

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