EDWARD HOPPER Y EL OCASO DEL SUEÑO AMERICANO
EDWARD HOPPER Y EL OCASO DEL SUEÑO AMERICANO
Por Adolfo Vásquez Rocca
Edward Hopper
Tras el creciente interés concitado por la pintura de Edward Hopper -quien ha sido elevado a la categoría del artista norteamericano más representativo del siglo XX- cabe preguntarse por las causas de este fenómeno, más aún cuando Hopper como artista no fue nunca un revolucionario: ni en su técnica pictórica, ni en su lenguaje artístico, ni, tampoco, en la elaboración intelectual que se hallaba tras sus telas. Hopper 2 fue más bien un conservador, incluso un reaccionario 3; el concepto aplicado a su pintura, american scene painting , refleja a la perfección su mundo: un universo en el que no tenían cabida las rupturas de la abstracción y las inquietudes vanguardistas de la pintura europea. Sin embargo, aunque Hopper no lo supiese, lo que pintaba era un mundo sin salida, donde sus habitantes estaban atrapados. Todos sus cuadros parecen encerrarse en una impotencia tranquila, resignada, que fluye desde el rostro de las figuras solitarias o se disemina por las escenas urbanas.