Escáner Cultural

REVISTA VIRTUAL DE ARTE CONTEMPORÁNEO Y NUEVAS TENDENCIAS

ISSN 0719-4757
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Blog

 

 

Poetas Anónimos

Calos Yusti

Cuando era joven me enganché a la poesía. Era como un vicio desquiciado eso de ser poeta. Leía mucho a los poetas malditos. Me desayunaba con Lautremont, Baudelaire, Rimbaud; para después almorzar un Verlaine copioso y suculento. Para la cena redondeaba con un clásico del malditismos como François Villon (1431-1463). Estaba fatal y andaba peor: desgreñado, sin asearme y convirtiendo la casa familiar en un infiernillo de gritos, discusiones y suplicios que ni la imaginación de Dante.

Esta etapa juvenil fue un tanto surrealista, sin ese brillante surrealismo literario claro. Como naufrago andaba por los cafés. En ocasiones merodeaba por la escuela de Teatro Ramón Zapata o por los pasillos de escuela de arte Arturo Michelena. Me curtía la piel con el arte visitando sus entrañas. Acababa de terminar el bachillerato y andaba en busca de algún trabajo sin buscarlo como es lógico.

En este trance de incertidumbre y juventud me ensamblé con otros individuos (y una antigua condiscípula del Martín J. Sanabria) y formamos una especie de grupo, peña, pandilla, cuadrilla, comparsa, que se reunía en un café cerca del Teatro Municipal. Pasábamos horas discutiendo de los últimos libros leídos y de los recién poetas descubiertos. No creíamos en nada. Fuimos una especie de grupo literario cuando la resaca del semejantes artificios de la literatura eran sólo páginas amarillentas de consulta obligada en hemerotecas. Éramos unos retrasados, unos anacrónicos.

 

 

Oscuras claridades del deseo

 

Carlos Yusti

 

 

Después de algunos libros escritos (y de muchas barras recorridas) con algunos premios importantes a cuestas, ubicar el destino de la poesía de Francisco Arévalo en ese dichoso panorama literario nacional, que tanto entusiasma a los críticos y reseñadores universitarios, es un tanto complicado. 

 

 

 

Leer en el barrio

Carlos Yusti

 

El barrio de mi adolescencia ha cambiado mucho y no me refiero al aspecto físico, sino al espiritual. El barrio de mis días juveniles tenía el alfabeto de ingenuidad escrito en el alma. Por supuesto que tenía sus monstruos de rigor, pero la gente enfrentaba todo eso con una dignidad de punta en blanco. Hoy todo los valores más elementales se han ido por el caño. Mi profesora de geografía económica insistía con una frase: “Lo único que no cambia es el cambio”, con semejante galimatías lo que pretendía era que recordáramos que el cambio posee una leyes inalterables/inapelables, que todo variaba menos esas leyes que regían al cambio. El Barrio cambió, pero sigue intacto en mi memoria y volver a sus calles es transitarlo de nuevo en el recuerdo sin nostalgia y con esa mínimo empuje de lo efímero.

 

CON MOTIVO DEL DECIMOQUINTO ANIVERSARIO
Carta abierta del Director Creativo

 

Mi nombre es David Molina y soy el nuevo Director Creativo de la Revista Escáner Cultural.

Con motivo del aniversario decimoquinto de la revista aprovecho la oportunidad de dirigir algunas palabras de presentación hacia todas las personas que felices apoyan, integran y participan de la revista, ya sean lectores, productores o colaboradores.

Escáner Cultural es una revista virtual de arte contemporáneo y nuevas tendencias que nace el año 1999. Tiene 15 años de vigencia y colaboran destacados columnistas de trayectoria internacional que promueven artículos especializados en Arte Experimental, Arte Correo, Poesía Visual, Performances y Nuevos Medios entre otros

La Revista Escáner Cultural es un medio de expresión y comunicación de arte hecha por artistas. Tiene un archivo cronológico de 165 Portadas que son consideradas una Obra Visual y más de 4 mil artículos especializados, reflejo de 15 años de actividad cultural.

 

EL ARTE, LA TRAMPA Y LA RATONERA

 

Carlos Yusti

 

El arte en la actualidad atraviesa un momento estelar y no precisamente por las constelaciones de genios que pululan en su ambiente, sino por la caótica catarsis de mal gusto, sicaterismo estético, improvisación llamada con rimbombancia como performance, arte efímero, instalación, arte conceptual y la falta elemental del dominio plástico (dibujo, composición, etc.).

Todo esto conjugado ha empujado al arte actual a una calleja sin salida, a una especie de agujero de crisis que sin duda dará frutos artísticos menos fraudulentos y algo más duraderos.

 

 

Albert Camus, el filósofo transparente

Carlos Yusti

 

En el barrio de mis andanzas adolescentes mi amigo Juan Aponte  era un nietzscheano de piel oscura y racista. Por mi lado yo leía en si no a Jean Paul Sartre y a Albert Camus. Juan me decía que leyera filósofos de verdad y no propagandistas partidista con labia seudofilosófica. Como es lógico le hice poco caso a Juan, aunque también leí a Nietzsche y al final me atrapó Camus.

MUY BUENOS DIAS
Este es un Blog de Comix.
Y esta es su primera publicación.

Empiezo entonces con el primer comix que he hecho.
"Barrabases Chile - Argentina" del lejano 1992
cuando todavía era un inocente querubín.

Más adelante publicaré obras más maduras
Por el momento disfrutemos la sinceridad del inexperto

Haciendo clik en la imagen o en el Link
Podreis leer la historieta en cuestión.

 

Barrabases Chile Argentina 1992

http://issuu.com/bailarines/docs/barrabases_chile_argentina

 

Hola de nuevo.
Espero que hayan leido la historieta en cuestión
Porque ahora la comentaremos
Si no la han leido
sería bueno que lo intentaran 

...

IDENTARIO DE UN HÉROE PATRIO

Que siga soñando, total, ya luego se cae del catre

 

Por: Carlos Osorio

clom99@gmail.com

Sueño que se reitera inagotable y, curiosamente, lo desvela; que le cedan el paso y así encaminar sus restos al estacionamiento definitivo de los aptos, nunca será pesadilla; sigue siendo su norte. Que ojalá sea junto a los líderes culeros, funestos y destartalados; porque así, con ese gesto de cercanía con los despreciables, demostrará su real valía, es lo que espera desde hace rato, pues se considera un repuesto de lujo con el cual es posible ajustar aún más la nacionalidad y la existencia misma de la patria, y eso ya es utilidad –bosteza y reflexiona.

 

Le duele que aún no lo hayan detectado, lo atormenta que nadie le dé bola, sobretodo ahora que lame huellas y cicatrices del maltrato recibido días atrás. Toda una contrariedad –se dice. Algo adolorido recuerda esa negra jornada de tranquilizantes apaleos por cuenta del insensato cocinero, experto en conchalepas, un as en eso de picarlas finito. Que se las sabe de todas-todas a la hora de afanar la carne dura que normalmente allí se consume, y que no trepidó en mostrar su vocación de servicio cultivada en los mataderos y establos contiguos, dándole con todo al sufrido Miguel Ángel.

Pese a la paliza, siente que igual salió ileso del impiadoso carnicero. Recuerda haberse puesto bien rígido, nada le cuesta, y entre más lo castigaba, más su entusiasmo, más su deseo, más su porfía por destacarse entre tanto loco. Puso su humanidad enterita, con tal de ser simpático y condescendiente con quien lo agredía, total, se siente un ganador y saco de arena al mismo tiempo, que no hubo caso deformar, menos desperfilar.

NOT HAMLET

Edificio de la Bolsa Mexicana de Valores en México DF, diseñado por el Arq. Juan José Díaz Infante N, 1990

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Crear módulos celulares

de dimensiones sensoriales

donde se desarrolle en equilibrio

Escáner Cultural nº: 
154

IDENTARIO DE UN HÉROE PATRIO

 A ver a qué hora le devuelven el hito (y las pilas)

 

Por: Carlos Osorio

clom99@gmail.com

 

Tremendo diluvio mental con aquel monólogo que lo dejó exhausto, para el gato, a medio morir saltando. Demasiado esfuerzo en sus versos, en cada párrafo vomitado con sabiduría, en cada silaba pronunciada desde las tripas hacia su bocota a esas alturas desencajada y que nunca razona más allá de las caries; porque en ella se incuba la incoherencia que asusta al resto, sobre todo, por esa manía de evidenciar el amplio imaginario heroico que no hay caso consensuar con quienes ven en su actuar la pelotudez más grande imaginada, incluso más grande que el buque manicero en donde descansa su estirpe, abajito ahí del frondoso árbol, justo a esta hora de dolores estomacales y la tremenda migraña que, solidaria ella al igual que su sombra, aplaude las certezas de su estatuaria existencia.


 

John M. Bennett
 
olvido
 
mondado sorta ,trozos de
peso antescudo y en la
fila un río de zapatos de
ruedas minimínimas donde 
un papel nos espera ,y un
aire vacío un mapocho in
visible en su túnel largo
un sueño corto un des
pertar al lado de mis
tripas nultrañables y
hay un sol olvidado casi
,recuerdo del vino ,y
del humo del su r        r
 
...y en el ala truncada, 
el vuelo abierto como boca.
- Vicente Huidobro

IDENTARIO DE UN HÉROE PATRIO

Monólogo mientras surte efecto el ritalín

 

Por: Carlos Osorio

clom99@gmail.com

 

 

IDENTARIO DE UN HÉROE PATRIO

A falta de tranquilizantes, el monólogo es su mejor hidratante.

 

 

Por: Carlos Osorio

clom99@gmail.com

Ya son varios los que se aglomeran bajo sus pies, porque se sienten tocados por su vasto lenguaje. Unos; en señal inequívoca de bronca sobre su humanidad que se sigue luciendo sobre el mueble de la tele, para él, la mejor tribuna cercana a la idea monolítica que se requiere en esta etapa, porque al menos permite sintonizarse en cadena nacional. Los otros; los menos, se sienten interpretados por la suavidad de cada palabra y que mantiene a raya el elevado entusiasmo, como que aplaca la ansiedad y no crearles falsas expectativas que hagan colapsar su delirante humanidad. Miguel Ángel utiliza toda su verborrea de ex marino, estrategia que por años ha practicado. Sin duda, tremenda arenga identitaria a modo de dejar bien en claro su rol previamente encomendado por la santísima providencia y, desde luego, por la patria que lo vio nacer y que requiere de su martirio para más tarde que luego...para más luego que tarde.

Y ahí va el segundo embate, como si fuese el mismísimo candidato del cielo. Por cierto, siente que lo es. Y se introduce nuevamente en su clamor:

IDENTARIO DE UN HEROE PATRIO

De tal palo (donde las astillas mentales surten efecto) otrosí.

 

Por: Carlos Osorio

clom99@gmail.com

Se sorprende de la cantidad de revelaciones y anécdotas del chamuscado pariente víctima de la desgracia del fuego. Un almanaque fáunico que saca chispas a su entusiasmo; que era bonito como una pelotita de basquet, sí. Que comía a sus horas, como un verdadero puerco, sí. Que se dormía tempranito, como un oso invernando, sí. Que era un enérgico y hediondo cuando se requería, como un jabalí, sí. Que rezaba como un demonio, como el de Tasmania, sí. Que lloraba con pasión, como entre hiena y cocodrilo, incluso como orangután despechado, sí. Que sus visitas al baño eran calladitas y elásticas, nada de andar vaciándose en público, como los mandriles, si.

Gestos sen-si-bles y excepcionales que entusiasmarían a cualquiera; Funcionales a la hora de poner a punto el candente seso que no para en ese afán de concentrarse pese a las taras que revolotean y lo distraen y que hierven como caldera del diablo. Al final, son los complejos pelotones de sangre, verdaderos pre aneurismas, los que se tropiezan y carcomen y angustian la aorta y empalidecen su ser y marean su porte y las nauseas son en intervalos y el güater se asusta y el resto es pura incontinencia y la batahola continúa y la hediondez atrapa el fugaz instante antes de morir en su propia fetidez.

IDENTARIO DE UN HÉROE PATRIO

A ver si las cenizas sirven, al menos, para los cimientos

 

Por: Carlos Osorio

clom99@gmail.com 

 

Soberbia que se plasma idiotizando ese su instante de relajo frente a la pantalla, calambres que se estiran ante la escena arrancada de película gore; pichones que terminan desangrándose justo sobre el féretro que chorrea el licuado coraje del nauseabundo y último combatiente de aquella guerra que nunca existió. Toda una puesta en escena que sirve para mantener contento a Miguel Ángel. Teleserie diaria que lo tiene vuelto loco, un estímulo al final de cuentas según sus carceleros, para que se recupere prontito de aquel insoportable dolor de cabeza, de esa migraña que considera le metieron a la fuerza con tal de distraerlo y demorar su asunción a los monolitos.

Alegoría macabra que lo prende y fortalece al paso de las horas, de los días, de seguir insistiendo en sus planes de inmortalizarse, por sobretodo de fugar su estirpe y clarividencia lejos de allí. Plan en donde el comando dispuesto como promesa por su tío, jugará un papel estelar. Que no costará mucho convocarlos, puesto que no descansan de los eternos y nerviosos ires y venires a tribunales, de su sedentarismo en los centros de reclusión en donde son amos y señores. Esforzados fusileros que se encargarán de entregarle toda la fulminante gloria -todo por la patria y sus hijos es su lema- para aquel día en que deba transformarse en piedra angular y reflejo granítico, en faro que alumbre como tea, por más la cremación definitiva a su filigrana sea requisito previo.